Se suele decir que repensar, es volver a pensar algo con detenimiento. El domingo 6, de la mano de Atari y Tabakalera tuvimos el pretexto perfecto para Re-pensar con las familias en acción, las bondades y las carencias de la plaza Martín Santos de Egia. De un lado tuvimos al sol de nuestra parte para preparar el terreno de la plaza, del otro, a los usuarios habituales del entono, las niñas y los niños, vecinos del barrio, que conocen al dedillo, todos los pliegues del espacio. Nosotros propusimos una acción reflexiva, donde, como croquizando con lápiz sobre papel, las familias construyesen con sus manos, comprometiéndose con sus deseos íntimos, unas estructuras de cartón a escala de sus demanda.Unas maquetas que vendrían a habitar la Plaza Haundi de modo efímero. El juego de re_pensar, en blando!
Las anécdotas serían infinitas de relatar, pero tal vez, las que tienen que ver con el cruce de generaciones en la plaza, las que tienen que ver con establecer un punto medio, un lugar común de encuentro e intercambio de conocimiento, sean las más apetecibles. Los aitonas y las amonas, que habitualmente dan buena cuenta de la plaza, aprovecharon la mañana, para jugar con nosotr@s.
"Ya teníamos planteada una zona de juegos de suelo con, twister, bola jokua y txiba jokua, cuando apareció una pareja de abuelos en mangas de camisa, sobre el terreno. Por aquel entonces un chico nos daba instrucciones precisas de cuanta presión aplicar a las vueltas de cuerda de las peonza. las ocho primeras fuertes y flojas las siguientes... de pronto, como sin esfuerzo, con soltura, tal vez a base de marianitos, un hombre enroscó una cuerda en una txiba, sonrió y se la lazó literalmente a la mano, logrando bailarla espectacularmente, sobre su palma, para asombro del resto de jugadores; decía recordar a un hombre de su pueblo que la bailaba en la cabeza!. El juego de suelo, había pasado a otro nivel!!"
Con este tipo de iniciativas participativas, es posible el análisis de la dinámica urbana, pues las hipótesis planteadas sobre el terreno, al ser físicamente construidas, testan con inmediatez las posibilidades, densidad y calidad reales de los flujos humanos por la plaza. In situ, se valoran mejor los suelos y las fachadas, se conocen gentes, te diviertes...estas propuestas evanescentes, se alejan mucho de otras teorías de mobiliario urbano, ideadas desde la mesa.
"Ya teníamos planteada una zona de juegos de suelo con, twister, bola jokua y txiba jokua, cuando apareció una pareja de abuelos en mangas de camisa, sobre el terreno. Por aquel entonces un chico nos daba instrucciones precisas de cuanta presión aplicar a las vueltas de cuerda de las peonza. las ocho primeras fuertes y flojas las siguientes... de pronto, como sin esfuerzo, con soltura, tal vez a base de marianitos, un hombre enroscó una cuerda en una txiba, sonrió y se la lazó literalmente a la mano, logrando bailarla espectacularmente, sobre su palma, para asombro del resto de jugadores; decía recordar a un hombre de su pueblo que la bailaba en la cabeza!. El juego de suelo, había pasado a otro nivel!!"
Con este tipo de iniciativas participativas, es posible el análisis de la dinámica urbana, pues las hipótesis planteadas sobre el terreno, al ser físicamente construidas, testan con inmediatez las posibilidades, densidad y calidad reales de los flujos humanos por la plaza. In situ, se valoran mejor los suelos y las fachadas, se conocen gentes, te diviertes...estas propuestas evanescentes, se alejan mucho de otras teorías de mobiliario urbano, ideadas desde la mesa.
Como conclusiones, a bote pronto, de este taller nos quedamos con la necesidad apremiante de los pequeños de acercar el agua y la naturaleza al corazón de la plaza; con la necesidad de explorar y explotar aun más, el factor de escala dentro de las superestructuras de acero de las pérgolas, y amigarse con los elementos de sombra que todavía propician nuevos juegos en altura. Nos quedamos como buena, con la posibilidad de solapar siempre en la plaza dura, varios esquemas lúdicos diferenciados. Proponemos experimentar con el mobiliario urbano un tiempo, para adaptarnos a todas las necesidades de expresión y de juego constructivo. Satisfacer en lo posible la realización de un sueño colectivo, o cuando menos quedarnos con la sensación del proverbio asiático, que habla de que, cuando las manos andan ocupadas, el corazón de las gentes está en paz!! Gracias a tod@s los que hicisteis de esta mañana de domingo un hermoso día; seguiremos pensando... Ver más fotos aquí!
